La ruta andina que une La Ligua (Región de Valparaíso) con Ovalle (Región de Coquimbo) es un buen reflejo de cómo la historia marcó esta región.
Originalmente, este sendero construido por los incas comunicaba a este pueblo con regiones
distantes del centro de su imperio ubicadas en lo que hoy es la zona central de Chile. En
el siglo XIX, la antigua ruta dio paso a una vía de ferrocarril que se convirtió en un símbolo
de la modernidad minera de un Chile pujante en plena era industrial. Más adelante, con
la construcción de la carretera Panamericana en la década de 1950, tanto el viejo camino
altiplánico como el ferrocarril cayeron en desuso y el sendero inca quedó sumergido en el
encanto del desierto.
Pero el antiguo camino imperial -bien pavimentado en algunos trechos- sigue vigente para la
aventura: atraviesa un paisaje de vegetación agreste y palmas chilenas a lo largo de unos 430
kilómetros de laderas andinas y pasa a través de cinco túneles centenarios otrora construidos
para el paso del tren a vapor
Se comienza pedaleando entre las palmeras de la ciudad de La Ligua, célebre por su artesanía
textil y por una vida provinciana. Ubicada al norte de Santiago, bastan unas horas en auto o
en bus para arribar a sus tranquilas calles. Luego se pedalea hasta la localidad de Cabildo,
pasando por el túnel La Grupa.
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| Palma chilena |
La empinada cuesta hacia el histórico túnel La Grupa detendrá varias veces el camino para
recuperar el aliento y disfrutar las vistas panorámicas sobre las cuencas de los ríos Petorca y
Ligua. A la entrada del túnel encontraran un semáforo que regula el flujo de vehículos por el
tramo de una vía que se extiende por el siguiente kilómetro: otra oportunidad para descansar
y mirar alrededor. Este túnel, construido en 1907 para los trenes de carga, se mantiene en
buen estado pese a los terremotos que han afectado esta región y sigue siendo una conexión
importante entre Cabildo, Petorca y otras localidades nortinas.
Al norte de Cabildo en la localidad de Pedegua, la ruta se dirige al noroeste llegando a la
frontera regional entre Valparaíso y Coquimbo. Aquí, el túnel Las Palmas ofrece sombra
contra el calor de la tarde y la posibilidad de revisitar el pasado. Inaugurada en1904, esta vía
subterránea recibió elogios de parte de ingenieros europeos que la consideraron un hito de la
ingeniería chilena de la época.
Del otro lado, emergerán entre un espeso bosque de palma chilena, especie endémica
reconocible por sus troncos suaves y hojas de terminación lisa. Al norte del túnel Las Palmas,
desparece el pavimento y comienza el segmento de grava. Más vale que viajen preparados
con una bicicleta de estructura sólida y neumáticos adecuados ya que esperan más túneles
ferroviarios reconvertidos y unas cuantas pendientes de grava antes de llegar a Illapel.
